RUTA DEL INCENDIO
Cantabria es un lugar único que enamora a todo el que lo visita. Con una costa acantilada de película, unas playas de ensueño y unos parajes naturales que no tienen nada que envidiar. Su capital, Santander, es una parada obligatoria en tu visita a Cantabria. Es una ciudad con orígenes romanos y desarrollo en la Edad Media, en tu paseo podrás ver las huellas de su pasado y entender el crecimiento de la increíble ciudad. Si quieres información para preparar tu viaje perfecto, te recomendamos que leas nuestro artículo, Santander Información Práctica.
Si hay un acontecimiento que supuso un antes y un después en la historia santanderina, fue el incendio de 1941. En la madrugada del 15 al 16 de febrero de 1941 se inicia en la ciudad un incendio devastador que marca la configuración actual de la ciudad.
No era la primera vez que la ciudad tenía un susto de este tipo, ya que, en 1893, en el puerto de Santander, había explotado un barco, el Cabo Machichaco, que llevaba dinamita como cargamento. Fue una tragedia que supuso la muerte de más de 500 personas, aunque algunas fuentes hablan de más. El monumento en honor a las victimas de la gran explosión lo puedes encontrar en la plaza de Machichaco.
El incendio de 1941 se produce en Santander en un contexto de posguerra, donde la pobreza que dejó la Guerra Civil española hizo que los materiales y los mantenimientos de las viviendas no fueran los mas adecuados. Se dieron en la época otras tragedias como la explosión del polvorín de Peñaranda de Baamonde o el accidente ferroviario de Torre del Bierzo.
No se sabe con seguridad que causó el inicio del incendio, pero si que se inició en la calle Cádiz. Se habla de una chimenea o de un cortocircuito. Pero lo que ayudó a que se extendiera de manera asombrosa por una parte importante de la ciudad fue el fuerte viento de dirección sureste y las condiciones atmosféricas que en ese día había en Santander.
Aunque para el día 18 la mayoría de los focos estaban apagados, no fue hasta 15 días después cuando se dio por finalizada la catástrofe, al haber acabado ya con todos los focos
El resultado fue la casi total destrucción del casco histórico y la parte más antigua de la ciudad. Aunque la mayoría de los edificios medievales, ya habían desaparecido, si se llevaron por delante las llamas el trazado típico medieval y el Santander barroco y clasicista de la Edad Moderna. Algunos edificios quedarían en pie, pero el riesgo de derrumbe dejó la zona como catastrófica. Era además el pulmón de la ciudad, donde se llevaba a cabo la vida tanto social como económica de Santander.
Teniendo en cuenta que en Santander vivían alrededor de 100.000 personas, y que el incendio afectó a unas 10.000, sobre un 10% de los habitantes de la ciudad perdieron sus casas, comercios o negocios. Sucumbieron a las llamas alrededor de 1.700 viviendas, más de 500 comercios, 9 imprentas y más de 150 negocios, desde hoteles a bares.
Tras el incendio se llevó a cabo una reconstrucción y la creación de un Plan de Urbanismo que cambió el planeamiento de la ciudad, los usos del centro y por supuesto, las arquitecturas y la organización. Los terrenos fueron expropiados y subastados, lo que provocó una importante especulación inmobiliaria. Las familias desplazadas, sumidas en la pobreza, se asentaron en las periferias de Santander, en ¨casas baratas¨ que fueron construidas en zonas como Canda Landáburu o Pedro Velarde. Mientras el centro se proyectó como un centro comercial y residencial, pero para familias acomodadas. Esto crea una jerarquización de los espacios, dependiendo de las posibilidades económicas de cada uno de sus habitantes.
Fue una reconstrucción agresiva, que quiso hacer un Santander nuevo. No se buscó respetar el tradicional trazado santanderino, ni tratar de reconstruir edificios emblemáticos como el Palacio de Riva Herrera. Fue un barrio completamente de nueva planta, por lo que el actual trazado que puedes ver al pasear por Santander, nada tiene que ver al que había en esa zona en 1940.
El modelo que se sigue en Santander era ¨la moda¨ del momento, con grandes avenidas con buenas comunicaciones, para lo que se dibujó un nuevo trazado para el tranvía. Un planeamiento concéntrico donde cada anillo tiene su función y también su población.
Esta claro que el incendio de 1941 marcó el presente de Santander, pero también su futuro. Tal importancia tiene en la historia de la ciudad, que una de las rutas que debes hacer en tu visita es la conocida como Ruta del Incendio. Está centro del conocido como Anillo Cultural de Santander, del que puedes informarte en nuestro artículo de la Guía Explora Playa de Santander.
Fue creada en el 2016, para conmemorar el 75 aniversario de la tragedia. El objetivo es que tanto santanderinos como turistas, conozcan el pasado de Santander. La ruta consiste en recorrer una serie de tótems ilustrativos que se han situado en puntos clave. En ellos podrás ver imágenes del antes y después de esos lugares, y además conocer la historia de Santander tras el Incendio de 1941. Te invitamos a que escanees el código QR para completar la información y descargar la app que tiene contenido audiovisual añadido, y además ofrece la opción de elegir idioma.
Son un total de 10 puntos a visitar y el denominado como Totem 0 está en la calle Cádiz, donde se cree que se inició el incendio de Santander. Puedes hacerla por tu cuenta o con un tour organizado que te permitirá conocer la historia pero también anécdotas o tradiciones, y preguntar todas las dudas que puedan surgirte. Por su puesto, dado que recorre algunos de los lugares indispensables de Santander, que puedes consultar en nuestro artículo, que ver en Santander, la Ruta del Incendio te permite conocer la ciudad de un modo diferente.
Descárgate la app y entra en al apartado de recorrido. Ahí aparecerán todas las paradas y el orden que debes llevar.
- 0. Calle Cádiz
- 1. Plaza de Machichaco
- 2. Jardines de Pereda, frente al Centro Botín
- 3 y 4. Jardines de Pereda, frente a la Plaza Alfonso XIII
- 5. Calle de San José, junto al Refugio Antiaéreo
- 6. Calle Puente
- 7. Plaza de Atarazanas en la Calle Calvo Sotelo
- 8. Calle Calvo Sotelo en el cruce con la Calle Lealtad
- 9. Calle Juan de Herrera
Si quieres unir tu paseo por Santander con una degustación de la increíble gastronomía cántabra, no dudes en visitar nuestro artículo Dónde comer en Santander. También puedes consultar nuestro artículo Dónde dormir en Santander, si quieres alojarte en la capital cántabra.