COLEGIATA SANTA MARÍA VIGO

Si estás en Vigo y te preguntas que hacer o que visitar, te recomendamos el artículo de nuestra guía Explora Playa, Vigo Información Práctica, en él, te informamos de lo necesario para tú visita a esta fabulosa ciudad. En el casco antiguo de Vigo se encuentra la iglesia de Santa María, el templo más popular de la ciudad y conocido como «La Colegiata». Es considerada como uno de los mejores ejemplos de la arquitectura neoclásica gallega.

La colegiata de Santa María o Concatedral de Vigo comparte la sede catedralicia de la diócesis de Tui-Vigo con la catedral de Tuy. Su construcción data de principios del siglo XIX, aunque sus orígenes se remontan a la Edad Media. La primera piedra se colocó en 1816 y las obras se alargaron hasta 1836. Originariamente había otra iglesia que contaba con un cementerio, pero debido al mal estado de ésta y a que medidas legislativas recomendaban la construcción de cementerios fuera del casco urbano, se decide construir una nueva. El actual edificio fue obra del académico Melchor de Prado y Mariño, de la Real Academia de San Fernando. Hoy en día acoge la imagen del Cristo de la Victoria, sin duda el emblema más religioso de la ciudad, que sale en procesión el primer domingo de agosto.

El actual templo destaca por su robustez, y de hecho fue pensado como posible plaza fuerte, en un contexto en el que acababa de terminar la Guerra de Independencia. La colegiata de Santa María presenta tres naves cubiertas de bóveda de cañón corrido. La nave central es más alta que las laterales, siendo estas más estrechas y con menos luz. La separación entre las naves se hace a través de doce columnas dóricas con su correspondiente entablamiento con triglifos y metopas.

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El interior de este templo, hecho todo él con magnífica sillería y soberbio enlosado, provoca una sensación especial de solemnidad y grandeza. La fachada principal tiene una ornamentación sencilla, con una composición clara y simétrica. El cuerpo central termina en una amplia cornisa adornada con mútulas y perfiles rectos, coronado el conjunto por un frontón triangular. Los cuerpos laterales están coronados por dos torres gemelas, más barrocas que el resto de la edificación.

La Colegiata viguesa añade dos sencillos campanarios que, ubicados a ambos lados de la fachada siguiendo la norma barroca adoptada ya en otros edificios neoclásicos, rompe en cierta manera la lógica armonía del gran frente arquitectónico. Cabe destacar el Reloj de Sol, situado en la fachada del lado derecho, colocado en 1837 obra del escultor Juan Agustín Domínguez. Éste no está orientado hacia el sur como es lo habitual, lo cuál hace que sea singular. La iglesia de encuentra en pleno centro histórico, muy próxima al mercado da Pedra y a la plaza de la Constitución.